Estimado Sr. Bradbury:

Le escribo desde ese futuro que usted anticipó para informarle de que lo hemos conseguido. Puede quedarse usted tranquilo. Por fin hemos logrado poner a salvo todos los libros de la historia. 

Finalmente no hemos tenido la necesidad de memorizar los libros y contárnoslos los unos a los otros para salvarlos de ser pasto de las llamas. Los hemos guardado en otro tipo de memoria. Los hemos duplicado y distribuido libremente, almacenado en todo tipo de dispositivos digitales: discos duros personales, discos en servidores, teléfonos móviles, tabletas, tarjetas de memoria, lectores de libros electrónicos, CD’s, DVD’s, ordenadores, redes de datos, internet. 

En estos momentos, es prácticamente imposible hacer desaparecer todas las copias de un libro de la faz de la tierra. Las autoridades nos han acusado de piratas y han aprobado leyes para impedir nuestra labor. 

No nos rendimos. Si los bomberos pueden quemar libros, los piratas podemos salvarlos. Seguimos realizando copias sin descanso, cada día, en redes p2p y en nuestros propios ordenadores, pese a que los bomberos levanten firewalls para impedir que compartamos los archivos. 

Espero que sepa perdonar que nos pongamos en contacto con usted mediante un email en vez de remitirle una carta tradicional, pero necesitábamos asegurarnos de que no sería paso de las llamas. Hemos puesto en copia al resto de unidades.

Fdo: 

Centigrado 232


Descubre más desde

Suscríbete ahora para seguir leyendo y obtener acceso al archivo completo.

Seguir leyendo