El relato que vas a leer a continuación fue Finalista del concurso de microrrelatos del Certamen Internacional de las Artes Fantásticas y de Terror Algeciras Fantástika 2020.

Las sombras aparecieron un día sin más. Pequeñas criaturas oscuras fueron halladas en los oídos de algunas personas. No fue posible encontrar un patrón. Individuos de ambos sexos, de edades, razas y condiciones sociales diferentes, encuentran al despertar una criatura anidada en su conducto auditivo. Las suaves larvas de sombra se enroscan como dulces gatitos. Su llanto continuado inspira ternura. Pronto aprenden a hablar y sus gemidos se transforman en historias susurradas al oído. Palabras nuevas y brillantes como lucecitas de colores que encandilan e impiden ver la oscuridad que crece en rededor. Palabras que alimentan primero los sueños y luego los miedos del portador. Palabras que enredan los cabellos, los dedos y los pensamientos, que acaban produciendo una terrible angustia de la que, a su vez, se alimentan las sombras. Los huéspedes, para entonces adictos y enfermos, las protegen hasta que ya no son capaces de ocultar al parásito. Llegado ese momento las sombras se extienden y adoptan su forma adulta y definitiva: una mancha oscura que sigue en todo momento a su propietario y que sólo lo abandonará cuando reposen sus huesos bajo tierra.

Ginimar de Letras


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